14 Octubre 2011
Debatir sobre la organización interna, participación, financiamiento, transparencia y control de los partidos políticos fue el objetivo del seminario “Reflexiones para un nuevo marco jurídico de los partidos políticos”, organizado por el Centro de Políticas Públicas UC, en conjunto con el Ministerio Secretaría General de la Presidencia y que se realizó el pasado 14 de octubre.
El Rector Ignacio Sánchez fue el encargado de dar inicio al encuentro, llevado a cabo en el Salón de Honor de la Casa Central UC. Le siguieron las palabras de Cristián Larroulet, ministro Secretario General de la Presidencia, quien afirmó que el Gobierno está guiando una reforma para que los partidos políticos sean más representativos, y que la agenda está orientada a aumentar la participación a través de la inscripción automática y el voto voluntario, la simplificación de los plebiscitos comunales y las primarias.
En el primer panel, titulado “Los partidos políticos: Organización interna y participación”, expusieron Alfredo Joignant, profesor titular de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Diego Portales; Juan Pablo Luna, académico del Instituto de Ciencia Política UC; Eugenio Guzmán, decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo y Lucas Sierra, investigador del Centro de Estudios Públicos.
Mientras Joignant afirmó que es necesario que “se fomente la comunicación interna, debidamente regulada y coherente” al interior de los partidos; Luna presentó las principales conclusiones de su trabajo de observación de las campañas electorales de diputados en Chile, de los años 2004 y 2009. Algunos de los problemas detectados fueron la falta de competencia y transparencia, marcada personalización de la política, debilidad de los partidos vs. caudillos locales, incapacidad de representar y canalizar institucionalmente amplias corrientes de opinión.
Eugenio Guzmán, por otro lado, afirmó que hay un “catastrofismo creciente” en la literatura, afirmando que hoy los electorados son más educados, informados y demandantes. “Es necesario que exista mayor transparencia, menos demagogia y menos exposición mediática”, aseguró
Lucas Sierra, encargado de cerrar el panel, planteó la necesidad de “aumentar la representatividad electoral, pero sin olvidar que tenemos un régimen presidencialista” y de realizar una reforma al actual sistema binominal. Agregó que antes de hacer una superintendencia de partidos políticos “sería más eficiente mejorar el actual Servicio Electoral”.
El segundo panel, “Financiamiento, transparencia y control de los partidos políticos” contó con la presencia de Salvador Valdés, coordinador de Políticas Macroeconómicas y Modernización del Estado del Ministerio de Hacienda; Claudio Fuentes, director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales de la Universidad Diego Portales; Jorge Jaraquemada, director ejecutivo de la Fundación Jaime Guzmán y Jorge Correa Sutil, vicepresidente del directorio de Chile Transparente.
Salvador Valdés propuso subsidiar la realización de talleres de participación política, que facilitarían a los dirigentes exponer las posturas de su partido o candidato a los ciudadanos; y cursos de formación que elevarían la capacidad de análisis de la mayoría de los candidatos a cargos de elección popular, y de quienes sean electos.
Mientras tanto, Claudio Fuentes afirmó que la Ley de Financiamiento es discriminatoria, pues los civiles sin fines de lucro que quieren hacer donaciones deben pagar impuestos. “Debería existir una entidad fiscalizadora, para lo que se debe potenciar el SERVEL”, concluyó.
Jorge Jaraquemada se refirió a la necesidad de transitar hacia un mecanismo dondelos fondos públicos no se asignen sólo por número de votos, sino que también en proporción al número de cotizaciones de militantes, así se incentivan ambos. Según él, el aumento de pequeñas donaciones, impediría la dominación de pocos grandes donantes en el partido.
Finalizó la ronda de presentaciones Jorge Correa Sutil, quien aseguró que “el desafío esencial es lograr institucionalizar la participación política y reforzar la representación”. Con el sistema binominal “no nos queda otra que primarias” para rescatar el valor de la participación institucional en política.
