16 Marzo 2016
Ante la reciente promulgación de la ley de Carrera Docente y la falta de estudios enfocados en las necesidades y experiencia de los profesores, tres académicos UC realizaron la investigación ¿Qué le piden los profesores a la formación inicial docente? para conocer las áreas que según los docentes de enseñanza básica no se abordan adecuadamente en los programas de formación inicial.
“Un consenso bastante amplio es que existe una brecha grande entre las instituciones formadoras y el sistema escolar”, explica Alfredo Gómez sobre lo que motivó la investigación que realizó con Viviana Gómez y Martín Bascopé, todos académicos del Campus Villarrica.
En un proyecto Fondecyt en el que participaron 70 profesores de siete escuelas de zonas urbanas y rurales pudieron identificar el trabajo administrativo como un área de desempeño profesional en que los programas de formación son insatisfactorios, pues según los profesores en la universidad no les enseñaron a trabajar en el libro de clases, hacer informes de notas ni cómo dirigirse al Mineduc.
La metodología de la enseñanza fue también identificada como inadecuada en 5 de las 7 escuelas. “Hay que poner atención cuando los profesores están diciendo que no les han enseñado a enseñar, porque la didáctica es el centro de la profesión”, advierte Gaete.
Otros aspectos en los que se sienten poco preparados –y que coinciden con dos estudios realizados anteriormente– son el dominio de grupo, la atención de la diversidad en la sala de clases y la relación con los apoderados. En esta última área los profesores expresaron falta de participación de los apoderados en el proceso de enseñanza y bajas expectativas de los padres respecto a sus hijos.
Los académicos explican que, hasta ahora, los programas de formación inicial docente se han centrado en fortalecer las disciplinas que se enseñan –como matemáticas, lenguaje y ciencias–, pero esto no sería suficiente. “Está mal encaminado, no es lo que los profesores están pidiendo (…). Ese no es el problema central de los docentes”, sostiene Gaete.
Para resolver esto a nivel de política pública los académicos sugieren que exista apoyo a las instituciones formadoras en las áreas identificadas como deficitarias y que haya una alianza entre la formación inicial docente y la escuela para una mejor inserción profesional. Otro punto clave es apoyar la investigación en esta materia. “Necesitamos conocer las deficiencias en los programas formativos para saber cómo corregirlos, necesitamos saber por qué fallan”, señala Gaete.
En el seminario en que se presentó la investigación, que será publicada como parte de Temas de la Agenda Pública del Centro de Políticas Públicas UC, participó el diputado Romilio Gutiérrez quien reconoció que “el vínculo entre la institución formadora y la realidad es un desafío que tenemos por delante”. Además, señaló que “avanzar en la formación de técnicos y directivos quedó pendiente en la ley de Carrera Docente”. Asumiendo que hay una desvalorización de los profesores, invitó a hacer más atractiva la profesión docente fortaleciendo la formación inicial.
Jaime Veas, jefe del Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas del Ministerio de Educación, destacó que esta investigación servirá para que los mentores –mecanismo que se establece en la ley de Carrera Docente– consideren los aspectos identificados como insatisfactorios en el proceso de acompañamiento de los futuros profesores.
Revisa la presentación de los investigadores aquí.
