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Cómo ven los chilenos su entorno social, familiar y regional

10 Noviembre 2014


Tras nueve años de aplicación de la Encuesta Bicentenario, estudio realizado por la Universidad Católica y GfK/Adimark, es posible apreciar las grandes tendencias que en esta década han caracterizado a la sociedad chilena, tanto en sus aspectos sociales, institucionales y vecinales, como también en el ámbito familiar y religioso, a través de la difusión de los datos que realizan “El Mercurio” y Canal 13.

Este año, la encuesta -cuyo trabajo de campo se efectuó entre junio y julio con un total de 2.012 respuestas efectivas- incluye, además de las preguntas permanentes, dos módulos muy atingentes a la contingencia nacional, como son la educación y la conciencia tributaria.

En momentos en que se discute una de las reformas educacionales más significativas de los últimos años, el estudio entrega relevantes antecedentes. Sorprende gratamente que, pese a los bajos índices observados en materia de confianza -en los que la mayoría de las instituciones consultadas baja-, los colegios y las universidades presenten porcentajes cercanos al 40%.

Asimismo, en relación con la calidad de la educación, los encuestados manifiestan una percepción favorable de la enseñanza preescolar y universitaria, siendo la secundaria la peor evaluada y donde se percibe el menor progreso en la última década. En el ámbito escolar, los colegios particulares subvencionados son asociados con atributos tales como mayor diversidad económica y social de los niños, formación de valores y hábitos, alto rendimiento escolar, disciplina y equipamiento. Un desafío plantea la baja preferencia por los colegios de carácter religioso. Respecto de la elección de la escuela, el 92% cree que son los padres quienes deben decidir dónde educar a sus hijos.

Se constata también un mayor optimismo en lo que se refiere a la posibilidad de resolver el problema de la educación en la próxima década. Igualmente positiva es la percepción observada respecto de las posibilidades que tiene un joven inteligente pero sin recursos de ingresar a la universidad, pues se percibe mayor facilidad de acceso. Sin embargo, prevalece una motivación algo instrumental de la formación universitaria, fuertemente marcada por expectativas laborales y de ingresos, y donde la contribución al desarrollo del país es escasamente considerada al optar por un título universitario.

El módulo sobre el pago y uso de los tributos también aporta interesantes datos. La encuesta da cuenta de una baja conciencia tributaria entre los chilenos. Un importante desafío para la autoridad plantea el alto porcentaje de quienes consideran que los recursos recaudados son mal utilizados por el Estado, al que se le asigna un rol fundamental en la asistencia a los más vulnerables, pero en equilibrio con la iniciativa privada. La gran mayoría atribuye al esfuerzo personal la oportunidad de progreso individual.

Reveladora es la valoración percibida respecto de la concepción de familia, tendencia que se observa en la evaluación de la paternidad que se realiza en el módulo “familia” de este sondeo. Los jóvenes tienden a evaluar mejor a sus padres que los de mayor edad, lo que podría indicarnos cambios en la percepción de la calidad de la paternidad en las nuevas generaciones. Sin embargo, los datos indican que esta evaluación varía considerablemente según el nivel socioeconómico y cae notoriamente en aquellos casos de ausencia paterna. Asimismo, pese al aumento de la aprobación del aborto en casos puntuales y de menor frecuencia, se mantiene un amplio rechazo a esta práctica ante cualquier circunstancia.

En materia religiosa, la encuesta constata que somos un país profundamente cristiano, pues incluso más de la mitad de quienes se declaran agnósticos dice creer en Jesucristo. Si bien -en los últimos años- se observa una mayor desafección religiosa, ello no se traduce en una postura hostil hacia la religión.

En el ámbito internacional, se refuerza la posición a favor de mantener una conducta independiente respecto de la región y, en materia vecinal, aumenta el rechazo a cualquier cesión territorial.

En su novena versión, la Encuesta Bicentenario ofrece valiosos datos sobre la percepción de temas fundamentales, permitiendo constatar cuáles son las grandes tendencias que perfilan nuestra sociedad. Los datos de este año nos muestran un país con expectativas de progreso, que confía en sus potencialidades individuales y que valora de manera especial y encuentra satisfacción en sus relaciones familiares.

Ignacio Sánchez, rector Pontificia Universidad Católica de Chile.

 

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